Belen Aldecosea, de 21 años, contó su historia el jueves y dijo que el incidente ocurrió mientras estaba en el Aeropuerto Internacional de Baltimore, Washington, cuando se dirigía a su casa en Miami Beach el 21 de noviembre. Spirit Airlines rechazó a Pebbles, la pequeña amiga de Belen, después de decirle dos veces que podía traerla.
Pebbles, por cierto, era un «animal de apoyo emocional» y había sido certificado por el doctor. En el primer año de Belen en el Wilson College en Pensilvania, tuvo un ataque de cáncer y la diminuta criatura peluda le proporcionó consuelo.
Ella dijo:
«Ella era muy amorosa. Era como si supiera que necesitaba a alguien».
Ahoga a su hamster en el inodoro del aeropuerto y dice que la obligaron
Según Fox New, Belen había llamado a la aerolínea dos veces para asegurarse de que podía llevar a su hámster en el avión. Supuestamente le dijeron que no había problema, pero una vez en el aeropuerto la situación cambió y no en beneficio del pequeño animal.
A Spirit Airlines se le mostró una carta de un médico certificando al pequeño como un animal de confort.
Le dijeron que estaba bien. Fue solo cuando Belén intentó registrarse que un empleado salió corriendo para informarle que Pebbles no podía volar, y ella asegura que Spirit Airlines le pidió que tirara a su hámster porque no se le permitiría subir al avión con el animalito.
«No tenía otras opciones. Estaba asustada. Fue horrible intentar ponerla en el inodoro. Estaba emocional. Estaba llorando. Me senté allí por unos buenos 10 minutos llorando en el puesto».
Belén está considerando demandar a Spirit Airlines por presionarla para que tomara esa decisión luego de decirle que Pebbles podía volar a casa con ella.
Los roedores de cualquier tipo no están permitidos a bordo en Spirit Airlines incluso si son animales de apoyo emocional. La aerolínea declaró que a Belen se le había dado información errónea sobre el hámster que la acompañaba en el avión, pero niega que alguien le hubiera dicho que ahogara al pequeño roedor.
Su abogado le dijo al Miami Herald:
«Este no era un pavo real gigante que pudiera representar un peligro para otros pasajeros. Este era un pequeño y lindo hámster inofensivo que podía caber en la palma de su mano».
Si te estás preguntando cómo un pavo real gigante encaja en todo esto, es probable que te hayas perdido la historia en enero sobre una mujer a la que se le negó un asiento en su vuelo por su pavo real de apoyo emocional. Aquí hay una foto de la historia.
Un portavoz de Spirit dijo:
«Para que quede claro, en ningún momento nuestros representantes sugirieron que este huésped (o cualquier otro para el caso) debería ahogar o lastimar a un animal».
Descansa en paz Pebbles, los humanos te han fallado.
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