Cheddar, un golden retriever, vivió con la misma familia toda su vida, hasta que tuvo alrededor de 8 años y a uno de sus padres le diagnosticaron cáncer. Ya no tenían el tiempo o los recursos para ocuparse de Cheddar, y tomaron la desgarradora decisión de entregarlo a un centro de rescate, con la esperanza de encontrar un nuevo hogar amoroso para él.
Cheddar tuvo que abandonar el único hogar que había conocido, pero afortunadamente, fue adoptado rápidamente por una hermosa nueva familia.
Desde el momento en que el perro llegó a su nuevo hogar, dejó en claro lo agradecido que estaba con ellos por haberlo adoptado, al exigir atención constante y querer estar cerca de ellos todo el tiempo, a cada momento del día.
Este perro insiste en visitar a su vecino favorito cada día
Shelley Vassall, la madre de Cheddar, dijo a The Dodo:
«Está muy, muy, muy necesitado. No puede estar solo. Todo lo que Cheddar quiere es tener toda la atención puesta en él, una vez que comienzas a acariciarlo y luego te detienes, él golpea tu brazo con su cabeza o te toca con su pata diciéndote que continúes. Te hará sentarte durante horas si pudiera, solo acariciándolo».
Cheddar ama a todas las personas que conoce, siempre y cuando estén dispuestas a prestarle atención, y no solía tener una favorita, hasta que conoció a uno de sus vecinos y se enamoró completamente.
Un día, Cheddar y su madre salieron a caminar, poco después de ser adoptado, cuando se encontraron con una pareja mayor sentada en el porche delantero. Se detuvieron para conversar un rato con ellos, y a Cheddar le encantó inmediatamente la mujer, Jean.
Estuvieron con ellos un rato antes de seguir su camino, y desde entonces, han vuelto a visitarlos todos los días, porque Cheddar se niega a que sea de otra manera.
Shelley dijo:
«Intentamos ir allí todos los días si podemos. Ellos viven a la vuelta de la esquina y una calle más de nosotros. Cuando han pasado más de unos días y no la hemos visto, Cheddar es especialmente vocal en la próxima visita. Él sabe exactamente en qué calle están y, de hecho, incluso si no vamos allí, él insiste en ello tirando de la correa e intentando girar en esa dirección. Si pasamos por la casa sin intención de entrar, él se planta con todo el peso corporal en un lugar y se para allí hasta que cedas».
Cheddar quiere visitar a Jean todos los días
Mientras que Jean tiene galletas para Cheddar cada vez que viene, el verdadero atractivo es la conexión que tiene con ella, que, por alguna razón, es diferente a cualquier conexión que tenga con alguien más.
Visitarla todos los días le trae tanta alegría, y todo lo que realmente quiere hacer en sus visitas es estar a su lado, por el tiempo que sea posible.
Shelley dijo:
«Cuando visitamos en invierno, pasamos el tiempo adentro y Cheddar solo quiere sentarse al lado de Jean y ser acariciado. Eso es todo lo que quiere. Cuando hace buen tiempo, primavera, verano y otoño, pasamos el tiempo en su patio trasero, donde le encanta rodar sobre la hierba con su correa o una pelota de tenis y luego sentarse junto a Jean para recibir más atención».
Cheddar espera con ansias sus visitas con su mejor amiga todos los días, y, por supuesto, Jean también los espera a ellos. El dulce golden retriever tiene 11 años y todavía tiene tanta energía y amor para dar, gracias a su increíble familia y a su tía favorita Jean.
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