Kris y Kia Papiernik han permanecido durante años cuidando de los gatitos sin hogar en Filadelfia, Pensilvania (Estados Unidos), a través de la organización de rescate Kolony Kats. Ellos rescataron a una gatita con unos adorables bebés y uno de ellos tiene una condición especial que conquistó de inmediato sus corazones.
Kris comentó a Love Meow que se encontraban conduciendo por su ruta diaria y notaron a la gatita mientras cruzaba la calle. La pareja que siempre se ha caracterizado por brindar ayuda no dudó en bajar de su auto para ofrecerle algo de alimento.
Ese día en particular era frío, no había nadie afuera, y cuando se acercaron pudieron percatarse de que la felina se encontraba lactando.
Gata lleva a los rescatistas donde sus gatitos
Ella se mostró bastante amigable, pero un poco nerviosa. La pareja decidió esperar en su auto y ver qué camino tomaba con el fin de llegar hacia sus gatitos.
La felina se dirigió hacia el porche de una casa, y allí dentro de una caja vieja encontraron a los cuatro bebés, quienes pertenecen a su cuarta camada durante los últimos dos años.
El dueño de la casa afirmó que se trataba de una gatita sin hogar, y la pareja decidió rescatar a toda la familia para que no terminaran deambulando por la calle.
Kris dijo:
«Estuvo de acuerdo. Regresamos al día siguiente y recogimos a esta pequeña familia. Fue entonces cuando notamos que teníamos un gatito especial».
Todos los gatitos y la madre fueron llevados al veterinario. Por fortuna los exámenes resultaron favorables, el más pequeño fue diagnosticado con labio leporino y anoftalmia, un trastorno genético que causa la ausencia del globo y el tejido ocular, pero ambas condiciones no afectarán su calidad de vida.
Los gatitos fueron ubicados en un hogar de acogida, gracias a una voluntaria llamada Roe. La madre de los felinos fue nombrada Eleanor y sin duda alguna ahora se encuentra más tranquila porque sus bebés están a salvo.
El pequeño gatito con labio leporino ha sido llamado Kurduroy. Él es unas onzas más ligero que sus hermanos, Koko, Kelsi y Kirby, pero su condición especial no ha sido impedimento para demostrar tener la personalidad más encantadora.
Aunque físicamente es diferente a los demás, su madre y hermanos lo adoran. Su mamá es muy atenta y protectora, se encuentra al tanto de cada uno de sus pasos para asegurarse de que estén bien.
Kris se encuentra feliz de poder ayudar a los gatitos a tiempo, pues dentro de dos semanas más o menos ellos hubiesen podido salir del lugar en el que estaban para enfrentarse a un futuro incierto en las calles.
La madre y sus bebés nunca más tendrán que aguantar frías temperaturas, luchar por conseguir alimentos, o correr el riesgo de ser lastimados por personas sin corazón.
Dentro de unas cuantas semanas estarán listos para iniciar una nueva vida en hogares permanentes.
Roe dijo:
«Mamá es absolutamente amorosa. Me deja tocar a sus bebés y me abraza mientras la abrazo. Los gatitos ahora pesan más de una libra y están increíbles. Eleanor se asegura de que estén bien alimentados y bien cuidados».
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