En Long Island, New York, cinco perros moribundos fueron rescatados tras haber vivido una terrible situación de indiferencia y maltrato por parte de sus humanos. Cuando la organización de rescate llegó al lugar de los hechos, la familia se encontraba disfrutando de una barbacoa, Veleda Bailey, de 35 años asaba hamburguesas mientras sus hijos corrían y jugaban libremente.
A ellos no les importaba el estado de los cinco perros y aún peor, sin importar que el cadáver de otro perro estuviese allí presente. El perro sin vida fue encontrado encadenado a un árbol y ahora la mujer ha sido acusada de crueldad animal por la Sociedad Protectora de Animales SPCA del condado de Suffolk.
La mujer aceptó que no le había brindado alimento a los perros en más de una semana.
Fueron los voluntarios de la organización Almost Home los que casualmente se encontraron con esta terrible situación cuando estaban brindando ayuda a mascotas de bajos recursos con alimentación y servicios veterinarios.
Ellos vieron a una pit bull hembra con una pésima apariencia y optaron por seguirla, fue allí cuando descubrieron las espantosas circunstancia que ella y los demás perros estaban viviendo.
Roy Gross de la SPCA dijo:
«Fue pura indiferencia. Estos animales son sólo seres amorosos que quieren afecto. ¿Cómo pueden hacerle eso a un animal?».
Los perros ya no están bajo la custodia de la mujer y los servicios de protección infantil fueron contactados para hacerse cargo de los niños. Tres de los cinco perros moribundos son aún cachorros y ahora se encuentran siendo cuidados y tratados por el refugio de animales Babylon.
El perro muerto fue recogido, puesto en una bolsa y se espera realizar una cremación o entierro digno, siendo esta probablemente una de las pocas veces en que se le dio importancia.
Linda Klämpfl, miembro de Almost Home, dijo:
«Un niño pequeño comentó que él pensaba que era divertido que el perro muerto ya no tuviera más ojos».
En el patio de una casa fueron hallados cinco perros moribundos y uno sin vida
Por otra parte, Bailey afirma que ella no cuenta con los recursos suficientes para alimentar ni a sus hijos ni a los perros, justificando así las devastadoras condiciones en que se encuentran.
Bailey dijo:
«Puedo dar a mis niños fideos durante todo el día, pero eso no es comida de verdad».
Ella demás afirmó que el perro encadenado perdió la vida dos días antes del rescate.
Si Bailey es declarada culpable tendrá que pagar una multa de $1000 y enfrentar hasta un año de cárcel, pero por desgracia ella no ha sido detenida aún.
Ella deberá presentarse el 30 de enero de 2017 en el tribunal de justicia donde se espera que sea declarada culpable y pague por sus actos inhumanos.
Más información: Pet Rescue Report | New York Daily News | ABC7NY | Rock & Rawhide
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