Una estudiante de 19 años llamada Gemma Holdway vive junto a su familia en una granja de Bath, Somerset, en el suroeste de Inglaterra. En marzo de 2018 el padre de esta joven encontró una camada de cinco animales recién nacidos en uno de los graneros; sin imaginar que a partir de ese momento cambiarían por completo el rumbo de la vida de una pequeña zorrita y sus hermanos.
En un inicio el hombre pensó que se trataba de unos gatitos, pero Gemma y su novio Dan Pearse quienes son estudiantes de ciencia y gestión animal, lograron ver que se trataba de una camada de zorros que por alguna razón desconocida no se encontraban al lado de su madre.
Gemma vive cerca a una carretera muy transitada y cree que la madre de los zorritos fue atropellada, pues al revisar el sistema de cámaras de seguridad nunca la vieron regresar por los pequeños.
Zorrita rescatada y un labrador son los mejores amigos

Los jóvenes decidieron ubicarlos en una caja con paja para mantener su temperatura y ambos sintieron una increíble conexión con una de los bebés; de hecho, la más pequeña de la camada.

Todos tenían miedo de que los bebés pudiesen morir debido a la ausencia de su madre, así que fueron trasladados a una clínica veterinaria para que los examinaran y posteriormente liberaran en su hábitat.

Allí lograron darse cuenta de que la zorrita estaba muy enferma y sus posibilidades de sobrevivir eran pocas. Lo adecuado era cuidar de ella hasta lograr su completa recuperación y fue llamada Vixey.

Gemma y su novio estaban conscientes de todos los cuidados necesarios para ayudarla y desde entonces Vixey ha convivido tranquilamente con los cuatro perritos de la familia llamados Luna, Raisin, Nidge y Oso Polar; siendo tratada como una más de la manada.

Después de cinco días en su hogar, Vixey abrió los ojos, y el hecho de familiarizarse con su entorno significó un gran peligro en caso de ser devuelta a su hábitat porque la identificación con los humanos significaba que podría no haber aprendido ciertos comportamientos esenciales para la supervivencia.

Gemma dijo:
“Vixey definitivamente se siente como un perro en su corazón. Entiendo que sigue siendo un animal salvaje y por naturaleza es muy independiente, pero creció rodeada de animales domésticos y seres humanos que la criaron como un animal doméstico. Si la liberamos en su hábitat puede salir lastimada o gravemente herida, los zorros salvajes van a oler en ella algo distinto y la verán como una presa para cazar”.

Vixey se la lleva muy bien con todos los perros, pero con Luna desde un inicio se presentó un vínculo muy fuerte, y ahora son las mejores amigas; generalmente se encuentran juntas.

La zorrita prefiere comer alimentos húmedos para perros, en vez de carne, aunque le han brindado pollo y cerdo en navidad suele rechazarlos. También se encuentra entrenada para ir al baño afuera.

Ella puede correr libremente por varios acres de tierra, su vida es muy agradable y relajada. Gemma espera llevarla a pasear junto a sus perros algún día, pero 3sta no se ha acostumbrado a usar correa así que están empleando un arnés para hurón.

La pareja es consciente de que aun sigue siendo un animal salvaje y que los depredadores la puedan encontrar si no cuidan bien de ella.

Aunque Gemma ama a Vixey no pretende que las personas se animen a adoptar a otros zorros como animales de compañía; el caso de esta pequeña fue muy singular debido al riesgo en que se encontraba.

La historia de Vixey y Luna resulta muy similar a la película de Disney de 1981, The Fox and the Hound, en la cual se logra ver la amistad poco convencional entre un perro y un zorro y esto es lo que mas ha cautivado a sus espectadores.