Maverick es un hermoso perro de raza Golden Retriver de Florida, su humano Joey Maxwell y su esposa decidieron adoptarlo hace 8 años cuando se encontraba en un refugio e iba a ser sacrificado y desde ese momento el vínculo afectivo entre los Maxwell y Maverick se ha fortalecido de una forma inimaginable. Actualmente, Maverick no se encuentra en las mejores condiciones de salud, pero este perro enfermo es muy feliz compartiendo con los seres que mas ama.
Sus anteriores humanos lo abandonaron en un bosque cuando apenas era un cachorro, por eso el pasado de Maverick no es el más agradable, aun así, el perro siempre ha demostrado tener un espíritu lleno de luz, fortaleza y positivismo ante la vida.

Maxwel dijo:
«Había pasado cerca de tres meses solo en el bosque».
«Cuando lo adoptamos, estaba absolutamente en la piel y los huesos, pero era perfecto. Él nos amó de inmediato, y sabíamos que iba a ser nuestro perro. Hemos estado con él desde entonces y ha sido espectacular».

Hace dos años, Maverick fue diagnosticado con linfoma. Por fortuna, su familia decidió hacer frente a la terrible enfermedad y el perro comenzó las quimioterapias que necesitaba, y aún en las peores circunstancias no dejó de ser el mismo ángel de siempre.
Al poco tiempo de empezar el tratamiento, Maverick presentó notables mejorías. Infortunadamente, hace dos meses el cáncer regresó y desde entonces su familia ha estado en una constante lucha para ayudarlo.

«Hace una semana, tuvimos una crisis. Nos levantamos por la mañana y él no podía caminar».
«Él se hizo en el suelo y apenas podía levantar la cabeza. Él no quería comer ni beber. Estaba temblando».
Maxwell no dudó ni un segundo en llevar a Maverick a un chequeo veterinario y allí se enteró que el perro estaba sufriendo de anemia y fiebre. Maverick estuvo bajo cuidado veterinario por dos días antes de regresar a su hogar.

Cuando Maverick regresó a casa se encontraba realmente débil físicamente, pero con su fortaleza espiritual siempre presente. Aunque parecían ser sus últimos días de vida, este perro no dejaba a un lado su alegría.
«Si esto es así, decidimos que lo último que él sienta sea la depresión de todos en la casa llorando por él. Queríamos que saliera e hiciera lo que más le gusta hacer, y eso es estar al aire libre, para llamar la atención. Le encanta ser amado».
«Estaba decidido a llevar a este perro fuera de la casa, para ir a dar un paseo, para conseguir una hamburguesa con queso y un poco de helado».

Como Maverick no podía caminar por su cuenta, Maxwell tuvo la idea de comprar un carro lo suficientemente grande para llevarlo a pasear, así que fue a una ferretería en busca de su objetivo.
«Ellos tenían los vagones agotados, porque acabamos de tener un huracán aquí».
«Me encontré con el gerente y le expliqué mi idea. Llamó a otras tiendas y en cinco minutos encontró uno, lo trajeron a la tienda, y me lo vendió el 50 por ciento de descuento. Lloré, y el cajero también».
Este perro enfermo es muy feliz paseando con su humano cada día

«Llegué a casa y puse la cama de Mav y una manta en el carro, trepé a Mav en él, y fui al centro». «Tan pronto como empecé a rodar la carreta, Mav dejó abierta la boca y su lengua afuera. Él levantó la cabeza de la cama y sacó una gran sonrisa de oreja a oreja».

«Hubo una transformación instantánea».
«Así que al día siguiente hicimos lo mismo. Noté que se animó un poco más. Lo hemos llevado al centro casi todos los días desde entonces. Ahora la gente ha empezado a reconocerlo y a decirle hola».

«Su salud ha estado realmente mejor».
«La primera vez que hicimos esto, nos pareció que era el último día o dos con Maverick. En lugar de ello, se está convirtiendo en la mejor semana. Ahora podrían ser los mejores dos semanas. Entonces tal vez el mejor mes. él es todavía muy amado».

Los constantes paseos han ayudado mucho a Mav e incluso ha encontrado la fuerza para sentarse por sí solo.
«Visitamos el veterinario ayer, y se determinó que en realidad está lo suficientemente sano ahora como para comenzar la quimioterapia».

En varios aspectos Maverick no ha logrado ser el mismo de antes, pero en otros, nada de su esencia ha cambiado.
«Se ha convertido en una celebridad local sólo haciendo lo que ama».
«Mav ama a todos, y ahora todo el mundo ama Mav».

Si quieres ayudar a Maverick a luchar contra su enfermedad por medio de una donación, puedes dar click aquí.
Más información: The Dodo | Everybody Loves Maverick
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