En 2016, se formó un vínculo inquebrantable entre dos compañeros improbables: Tiny Tim el chihuahua y Big Ben el gran pirineo. En cuanto se conocieron, parecía que el destino los había unido; su conexión era tan única que nada podía interponerse en su camino. Desde entonces, Tim es un miembro muy querido de la familia de Ben, ¡lo que demuestra que la amistad no tiene límites!
Jenny Leech, la madre de Tim y Ben, le dijo a The Dodo:
“Varias veces al día, salía a la sala de estar y encontraba a Tim profundamente dormido encima de Ben”.
Aunque Tiny Tim y Big Ben eran físicamente opuestos, ya que uno era alto y el otro pequeño, su amistad superaba cualquier diferencia de estatura. Durante seis mágicos años, los mejores amigos disfrutaron de su mutua compañía día tras día, un vínculo que ni siquiera el tiempo pudo romper.
Perro perdió a su mejor amigo y se acurruca con un juguete que se parece a él
Jenny cuenta que en los primeros años, cuando Ben era un poco más ágil, se acostaba en el sofá y Tim se acostaba justo encima de él.
Incluso cuando no estaban acurrucados en el sofá tomando la siesta, este increíble dúo era inseparable. Todo lo hacían juntos, como nadar, y rogar por comida a la familia en la mesa a la hora de la cena.
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Jenny adoraba observar cómo Tim y Ben conectaban entre sí, y creía que su amistad podía alegrar a los demás. Por eso les creó cuentas en las redes sociales, para poder compartir sus experiencias vitales con el mundo. Al poco tiempo, tenían decenas de miles de admiradores que estaban fascinados por su vínculo.
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Cuando Tim entró a formar parte de la familia, Ben tenía 7 años. Poco a poco, este gigante de corazón bondadoso empezó a experimentar problemas de movilidad. Aunque dejaba espacio a su hermano cuando parecía que algo no iba bien, Tim siempre permanecía cerca.
Jenny dijo:
“Pienso que Tim sintió algún cambio en él. En lugar de sus travesuras habituales de subirse a Ben, Tim fue más amable y se sintió contento durmiendo la siesta o sentándose a su lado”.
La noche del 24 de diciembre de 2022, un derrame cerebral golpeó trágicamente a Ben. A la mañana siguiente, su estado empeoró y falleció a los 13 años y medio, con quienes le adoraban a su lado, podemos consolarnos sabiendo que Ben cruzó el puente del arcoíris rodeado de sus seres amados.
Cuando Jenny compartió la devastadora noticia de la muerte de Ben en sus redes sociales y en las de Tim, una oleada de tristeza inundó a sus seguidores. Beth, una residente de Ohio que seguía a Jenny en Internet, se sintió especialmente conmovida por esta tragedia. Para mostrar su apoyo a Tim durante su duelo, le envió un regalo especial.
Jenny añadió:
“Ella le envió este enorme perro de peluche. Y desde el momento en que lo puse en el sofá, Tim lo reclamó”.
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Para su asombro, instantes después de colocar el peluche en el sofá, Tim saltó sobre su lomo como solía hacer con Ben. Se acurrucó en su suavidad y se quedó dormido. La mujer decidió no moverlo del asiento y pronto empezó a ver una escena demasiado familiar cada día.
Jenny recordó cuando iba a la sala de estar y Tim estaba encima de Ben en el sofá. Ella se sintió conmovida al observar cómo Tim abrazaba al perro de peluche como si fuera el propio Ben. Sintió una punzada de pena por su compañero desaparecido, pero comprendió que aquel juguete le estaba ayudando en su proceso de duelo.
A pesar de la adorable imagen de Tim acurrucado con su perro de peluche, Jenny puede ver que lo está haciendo de maravilla, incluso mejor de lo que esperaba. Se las arregla muy bien y no parece tener ningún problema.
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El perro de peluche de Tim permanece en el sofá, y cada vez que Jenny lo ve dormir plácidamente boca arriba, le invade la idea de que podría estar soñando con aquellos entrañables días pasados con Ben. Aunque ya no estén físicamente juntos, su vínculo permanecerá inquebrantable por toda la eternidad.
