Stacy Gould y su familia hablaron muchos días sobre abrir un negocio, y luego de debatirlo y pensar todo lo que querían hacer decidieron crear una librería para que las personas tuvieran un lugar tranquilo para pasar la tarde, además, como atractivo principal tendría la atención de su perrita Ruby.
Por lo general, los hijos y el esposo de Stacy se van a la escuela y al trabajo respectivamente, así que ella sabía que sería la encargada de ir a la librería todos los días. Como no quería dejar sola en la casa a Ruby, la mujer decidió que sería su compañera de trabajo.
Ruby significa mucho para su familia y también es la perrita más amable y dulce que puedas conocer, además adora hacer nuevas amistades.
Familia nombra una librería como su perrita

Stacy sabía que una librería en donde la gente pueda saludar a Ruby todos los días sería un lugar muy especial para ella. En muchos sentidos, el nuevo negocio familiar se convertiría en el lugar más atractivo para Ruby, y de esta manera nació Ruby’s Books.

Stacy dijo a The Dodo:
«Ruby tendría que venir conmigo todos los días a la tienda, así que pensamos: ¿Por qué no le ponemos el nombre de Ruby a la tienda?».

Ahora, Ruby se convirtió en la gerente y recepcionista oficial de la librería, y la perrita se toma muy en serio su trabajo y lo hace bien.
Aunque la tienda solo lleva año y medio desde que abrió sus puertas, Ruby y la librería ya se han convertido en un icono de la ciudad de California.

Stacy añadió:
«Los clientes aman a Ruby y se ha convertido en un elemento básico aquí en Sutter Street ¡A menudo bromeamos diciendo que la gente viene por los libros, pero se queda por el perro!».
Sin embargo, la familia de Ruby piensa que es muy importante que ella mantenga un equilibrio entre el trabajo y su vida personal. Por esa razón, no va a la tienda todos los días, trabaja de lunes a viernes y pasa los fines de semana con su familia.

Pero Ruby adora cada momento que pasa en la librería y pese a que tiene una gran cantidad de responsabilidades, las hace con mucho orgullo.

Stacy comentó:
«Sus deberes incluyen saludar a cada cliente en la puerta, darse la vuelta para frotarse la barriga, olfatear las golosinas dentro de los bolsillos de nuestros clientes, trapear el piso con su cola esponjosa y leer (bueno, ella finge hacerlo) junto a los niños. en nuestra sección de niños».

A Ruby le encanta tener su propia librería y su familia está feliz de compartir toda la alegría de su perrita con la comunidad.