El reino animal parece tomar un respiro y conquista de nuevo sus espacios naturales mientras los humanos permanecen en cuarentena por el brote del nuevo coronavirus. Un ejemplo de esto son las playas de la zona hotelera de Holbox, que se encuentra bordeada por la Reserva Natural Protegida de Yum Balam, en México.
Allí se han visto mantarrayas gigantes a las orillas de Punta Cotos; pronto se espera el arribo de tortugas carey y el avistamiento de delfines en la zona costera.
Además de las mantarrayas, diferentes especies de animales se han podido observar visitando las playas de esta isla, durante el aislamiento social que se mantiene.
Animales regresan a zona turística de Holbox en México

En Holbox, la tranquilidad y el silencio que se percibe hace notorio el canto de las aves por todas las calles, creando un ambiente pacífico. La isla se ha caracterizado por ser un santuario de aves donde flamencos, garzas y otras aves, descansan entre sus manglares y áreas someras.
En estos momentos, para nadie es un secreto que mientras los humanos están en cuarentena, el reino animal regresa a los espacios que solían visitar. Jabalíes por las ciudades, pájaros cantando, avistamiento de delfines, demuestra que la cuarentena ha dado vía libre a los animales que disfrutan de la calma.

Holbox, ha tenido un nuevo despertar al ver la necesidad de cuidar su patrimonio, entonces desde el 2019, voluntarios emplearon iniciativas para cuidar la naturaleza. Se han limpiado los manglares y las playas, no solo para los turistas sino también con el fin de proteger la fauna que las habita.
La asociación de Hoteleros, Ocean Conservancy, Parley, pobladores y empresarios, son las personas que contribuyen con los esfuerzos para proteger la naturaleza del lugar.

Holbox se está caracterizando por ser un lugar en el caribe que realiza grandes esfuerzos para proteger el medio ambiente. Las Nubes de Holbox, es un hotel ecológico que demuestra el compromiso y las diversas acciones que emplea para proteger su entorno natural.
El hotel trata el 100% del agua que usa, emplea un programa para reciclar los residuos que produce y próximamente estará utilizando energía solar.

El director del hotel, Jorge Ceballos, piensa que la pausa mundial ha resultado benéfica para la naturaleza y es importante aumentar los esfuerzos para cuidarla.
Jorge dijo a National Geographic:
«Este es un momento para tomar conciencia e impulsar un cambio auténtico, cuidando nuestro planeta por un período sostenido».
La manera en que las personas ven la naturaleza está cambiando, pues el encierro ha generado conciencia frente al medio ambiente. Mientras las personas pasan la cuarentena en sus casas, tienen más tiempo para pensar y para valorar las cosas simples de la vida.
El científico Romain Julliard, dijo a AFP:
«Quizás el fenómeno más importante es que nuestra manera de ver a la naturaleza está cambiando; las personas confinadas se están dando cuenta de cuánto extrañan la naturaleza».
Al pasar el tiempo, lo más probable es que se controle el brote de coronavirus y con ello se regrese poco a poco a las actividades cotidianas.
Seguramente la vida se retomará de una manera prolongada, que nos permita tener hábitos más respetuosos con la naturaleza que nos rodea.
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Soy totalmente pesimista . Cuando se termine la cuarentena, las hordas humanas vendrán
con renovados bríos a destruir lo que en éste tiempo no pudieron hacer.
Va a ser doblemente lamentable, haberlos recuperados un tiempo y ver que se van demasiado
rápido. Una pena.