Cuando Anna Love, la madre de acogida de Billie, se dio cuenta de que su dulce cachorra labrador tenía ansiedad por separación, supo que tenía que ayudarla. Anna, de Florida, Estados Unidos, no tardó en darse cuenta de que la perrita de seis meses odiaba estar sola.
Anna dijo a Metro UK:
“Billie es tan dulce y amigable con todo el mundo y todos los perros, pero no le gusta que la dejen sola. Definitivamente, tiene ansiedad por separación y también se pone ansiosa en los autos”.
Anna creía que Billie necesitaba a alguien que le hiciera compañía mientras estaba sola, así que Gus entró en su vida. La intención de tener un segundo perro era que Billie tuviera un compañero para acurrucarse y jugar, que la hiciera sentir segura y protegida cuando se quedara sola en casa.
Perrita ansiosa cuenta con su propio cachorro de apoyo emocional

Anna cuenta:
“Gus la ayuda a mantener la calma y le da otro compañero para jugar cuando estamos ocupados. Nos preocupaba que Gus no fuera tan dulce o mimoso como Billie, o que ella no le agradara. La verdad es que él la ama más de lo que yo o mi esposo podríamos haber imaginado”.

Gus ha ayudado a Billie a sentirse más confiada y segura cuando la dejan sola o la llevan de paseo en auto. También reconforta a Billie en situaciones de estrés.
Anna siente que traer a Gus a su hogar fue perfecto para Billie. El cachorrito ha sido un gran apoyo para su hermana, quien ha aprendido a manejar sus problemas de ansiedad gracias a su compañía.

Finalmente, Anna dijo:
“Gus ha ayudado a Billie a ser más independiente, y tampoco anhela atención como ella antes. Así que ahora Billie es más independiente y sabe que está bien hacer lo suyo”.