Rudy Armstrong, un veterano retirado de la marina, estaba relajado en su casa flotante con su fiel amiga, Bubu, en Carolina del Norte, cuando de repente algo raro comenzó a suceder con su estado de salud, su píe se quedó dormido y no podía moverlo, así que decidió sentarse.
Minutos después, se dio cuenta de que tampoco podía mover uno de sus brazos, situación que lo preocupó mucho, y no tenía muchas opciones para pedir ayuda.
Su fiel amiga Bubu, una perrita mezcla de Chihuahua, corrió a ver qué pasaba y de inmediato se dio cuenta de que algo andaba mal.
Pequeña chihuahua salva la vida de su padre humano
Rudy era incapaz de coger su teléfono, entonces miró a los ojos a Bubu y le dijo:
«Necesito ayuda, ve a buscar a Kim».
Sin pensarlo dos veces, Bubu salió corriendo de la casa flotante, como si hubiera entendido exactamente las indicaciones de su papá. Ella sabía qué hacer, así que corrió hacia el puerto donde pudo encontrar a Kim, el capitán del muelle.
Brandy Popp, gerente de relaciones públicas de CarolinaEast Health System, dijo a The Dodo:
«Se acercó y en lugar de su saludo habitual de ladrar, saltar y lamer, se detuvo en frente y se tumbó de costado».
Kim entendió el mensaje de Bubu, así que la siguió de regreso al bote y descubrió que Rudy había sufrido un derrame cerebral y llamó al 911. Los paramédicos llegaron al lugar y trasladaron de forma inmediata a Rudy al hospital, para brindarle una atención más especializada, mientras que Kim se hizo cargo de Bubu.
Gracias a la acción heroica de Bubu, su padre pudo ser atendido oportunamente por los médicos, por lo que se está recuperando muy bien.
Después de pasar semanas en recuperación en el centro médico Carolina East Health System, Rudy extrañaba mucho a su pequeña y fiel amiga.
Brandy dijo:
«Fui a la habitación de Rudy para escuchar los detalles de cuando Bubu ayudó a salvar su vida y tuve el placer de sentarme con él durante más de una hora, escuchando historia tras historia de su vida, su tiempo en la Marina y su vínculo especial con Bubu. El hecho de que no tenga amigos cercanos o familiares cercanos, me hizo pensar en organizar una reunión entre él y Bubu».
Conociendo la historia de Rudy, Brandy organizó todo el protocolo para que la reunión entre el veterano y su mascota se pudiera realizar satisfactoriamente.
Cuando llegó el día de la reunión, Rudy fue llevado al jardín de la instalación donde apenas podía controlar su emoción de saber que se encontraría con Bubu.
Brandy dijo:
«Antes de su llegada, Rudy prácticamente se balanceaba en su silla de ruedas como un niño en la mañana de Navidad».
Kim llegó con Bubu al centro médico, y ella parecía estar muy confundida por estar en un entorno desconocido, pero pronto reconoció a Rudy, quien se quitó el tapabocas y Bubu lo reconoció instantáneamente. Fue tanta la emoción que, saltó a su regazo y lo llenó de besos.
Brandy dijo:
«Fue un momento tan conmovedor que todos los presentes estaban al borde de las lágrimas de ver la alegría de Rudy y Bubu».
No cabe duda de que la compañía de su mejor y fiel amiga era la medicina que más necesitaba para seguir recuperándose de manera satisfactoria.
Luego de unos días, Rudy finalmente fue dado de alta y regresó a su barco acompañado de su amada Bubu para seguir viviendo tranquilamente.
