Mientras miles de ucranianos huyen de su nación en busca de refugio luego de que iniciaran los bombardeos en las principales ciudades del país, esta valiente mujer llamada Marina Dilly, fundadora de Shelter Friend Ucrania, cruzó la frontera hasta Polonia para resguardar a sus hijos, y luego decidió regresar a su país natal para proteger la vida de quienes no tienen voz.
Marina decidió regresar a Ucrania para ayudar a miles de perros abandonados en medio de los actuales acontecimientos y la destrucción de las ciudades a causa de los incesantes bombardeos.
La mujer trabaja junto a un equipo de personas que también decidieron permanecer en Ucrania, salvando a los animales más vulnerables en su refugio en Dnipro, situado en medio de todas las ciudades invadidas.
Refugiada regresa a Ucrania para ayudar y cuidar perros

Durante los últimos días, el refugio ha acogido a un gran número de animales abandonados y heridos, pero a la mujer le preocupa que pronto no pueda mantenerlos a todos a medida que se agoten los suministros con los que cuentan al momento.
El centro de rescate requiere con urgencia de alimento, medicamentos y ropa de cama para continuar salvando a los perros necesitados que tienen resguardados.

Marina dijo según Mirror.
“Shelter Friend se mantiene con vida. Ahora me llevo a todos los animales que la gente deja y veo en las calles. Estamos repletos pero seguimos ayudando. La gente sigue abandonando animales. Mi teléfono se ha convertido en una línea directa: he recibido muchas llamadas de personas que dejaron perros encadenados o encerrados en pueblos o casas de verano”.
En medio de este desalentador panorama, Marina continúa esforzándose por ayudar a los animales que las personas abandonan en medio del temor. El refugio actualmente cuenta con 7 perreras que se encuentran a tope de peludos víctimas de una guerra que no logran entender.
Marina dice:
«Ahora el dolor principal es el hambre de los animales callejeros, y los animales abandonados desorientados, ya que las sirenas les genera estrés y miedo por quedarse solos».
Esta difícil realidad que deben afrontar a diario las personas que permanecen en Ucrania y en especial aquellas que se niegan a dejar a los animalitos abandonados, es realmente desgarradora y ha acabado no solamente con vidas humanas, muchos animalitos han fallecido en las peores circunstancias. Marina no cuenta con atención veterinaria, así que muchos perros necesitados han muerto a causa de las heridas que sufrieron en las calles.

Sin importar los obstáculos, Marina continúa su trabajo y se esfuerza por ayudar al mayor número de animales con los pocos recursos con los que cuenta, junto a su maravilloso equipo que no se rinde y son la esperanza de estos peluditos desamparados.
Para ella, como para millones de ucranianos, el mayor deseo es que esta guerra termine pronto y puedan retornar a sus hogares.

Finalmente, Marina dijo:
“Cuando ganemos y termine la guerra, primero iré a Polonia para agradecerles a los polacos que están cuidando a mis hijas. Llevaré a mis hijos a casa y encontraré hogares para los cientos de animales necesitados en mi refugio. Entonces cumpliré mi sueño de construir perreras con calefacción en mi refugio para que vengan muchos animales como planeé el año pasado. Me iré de vacaciones al mar y respiraré sin esta terrible sensación en mi pecho”.