Stormy, un pitbull de dos años de edad, es el perro perfecto. Es amistoso, bueno con los niños, con los otros perros, incluso con los gatos. Es amable, cariñoso y juguetón. Pero cuando su antigua familia tuvo un quinto bebé, decidieron que ya no hacía más parte de ellos y lo abandonó en un refugio donde posiblemente sería sacrificado.
Alana Guerrini, voluntaria de Eleventh Hour Rescue, dijo a The Dodo:
«Pasó toda su vida con una familia con cuatro hijos, otros dos perros, uno pequeño y otro grande, y un gato. Luego la mujer quedó embarazada y tuvo su quinto bebé, y decidió que eran demasiados».

Stormy, que solía llamarse Freshy, terminó en un refugio de alta matanza en Brooklyn.
Alana dijo:
«Se podía ver el miedo y el terror en sus ojos en esa imagen [en el refugio], y se podía ver cuán desconsolado estaba. Miré esa cara, y me aplastó por completo».
Afortunadamente, Alana vio su perfil y se apresuró a sacarlo del refugio. A Stormy le quedaba poco tiempo de vida.

Alana dijo:
«Estaba previsto que lo sacrificarían a las 5 en punto, y eran las 4:58 o 4:59 cuando recibimos la noticia de que ‘te dejaremos llevarlo, y él es oficialmente tuyo y saldrá del corredor de la muerte'».
Entonces, Alana y su hijo de 16 años recogieron a Stormy y lo llevaron a su casa en Nueva Jersey, donde le brindarán hogar de acogida hasta que encuentre un hogar para siempre.

Ella dijo:
«Se subió a mi auto sin problemas. Mi hijo se había subido al asiento del pasajero, y él [Stormy] se subió al regazo de mi hijo, y se podía ver que con cada pequeño meneo y beso en la cara le estaba agradeciendo porque sabía que iba a vivir. Él es un ángel».
Pitbull fue abandonado en el refugio porque la familia tuvo un quinto bebé

Alana agregó:
«Quería sentarse en el regazo de mi hijo todo el tiempo, así que él tuvo que sentarse en el asiento trasero, y pasó una hora y media en casa en su regazo. La única vez que se quitó fue las docenas de veces que también quería besarme».
Alana pudo ver que Stormy había vivido con una familia antes, pero se sorprendió al ver lo amable que era con su hijo.
«Estaba luchando con mi hijo, y la mano de mi hijo se metió en la boca del perro… y el perro dejó la boca abierta y lentamente retrocedió la cabeza para que ni siquiera lo arañara. Fue entonces cuando supe que estaba locamente enamorada de este perro».
Stormy también estaba muy atento cuando el hijo de Alana no se sentía bien.

Alana dijo:
«Se quedó en la habitación con él todo el día y se acurrucó con él. Y cuando mi hijo se levantó, solo lo estaba siguiendo. Él solo quiere interactuar con la gente y ser amado».


Ella aún no puede creer que la antigua familia de Stormy lo haya abandonado, pero espera que otra familia vea el tesoro que es este perro y le dé el hogar que se merece.
Ella dijo:
«Es un pit bull juguetón de 2 años. Tengo que decir que es uno de mis favoritos que soy muy exigente, así que necesito encontrar el mejor hogar».

Si estás interesado en adoptar a Stormy, puedes ponerte en contacto con Eleventh Hour Rescue.
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Los animalitos – en este caso, el pitbull -, NO ES UN JUGUETE, es un ser que SIENTE, aprendamos ésto y no hagamos sufrir a quien nos da su amor incondicional.