El pequeño chihuahua llamado Bully, considerado el más viejo del refugio, tal vez no pueda contar todos los acontecimientos por los que ha pasado, desde que nació en 1999, pero seguramente no olvidará su fiesta de cumpleaños número 23.
Bully pasó los últimos 21 años de su vida al lado de una familia amorosa. Todos los días disfrutaba de la compañía de sus seres queridos, jugaba al aire libre con otros perros y daba muchos paseos en el parque local.
Pero, lamentablemente, cuando su anciano dueño no pudo cuidarlo más, decidió entregarlo a The Mr. Mo Project, un centro de rescate dedicado a cuidar de los perros mayores.
Perro más viejo del refugio celebra sus 23 años
El centro de rescate, dirigido por Chris Hughes y su esposa, se encarga de cuidar a los perros ancianos y enfermos, de personas mayores.
Ellos se encargan de cuidar a estos animales y de alentar a la gente para que adopte o brinde hogares de acogida a los perros, para que pasen sus últimos años de vida rodeados de mucho amor.
El antiguo dueño de Bully lo describió como: “un perro grade en el cuerpo de un perro pequeño”. En poco tiempo, Chris descubrió que, a pesar de la avanzada edad de Bully, no había cambiado mucho y seguía siendo muy enérgico.
Chris dijo a The Dodo:
«Bully es luchador, travieso, dulce, independiente, gentil, tranquilo y tiene un ladrido de viejo. Incluso a su edad, le gusta tratar de empujar a otro de nuestros chihuahuas».
Ahora que Bully es mayor, necesita descansar más que un perro joven, por lo que le encanta dormir y siempre se gana ese derecho.
Chris añadió:
«Se queda dormido en cualquier lugar, a veces en medio del piso de la cocina, en un orinal o en la cama más grande y cómoda de la esquina».
Bully siempre ha sido muy especial, por lo que Chris y su esposa decidieron celebrarle su cumpleaños número 23, de una forma inolvidable. Para ello, Chris decoró la casa en honor al perrito y le dieron las dos cosas que más ama en el mundo: golosinas y una siesta.
Bully no tiene demasiados dientes, pero ellos le desmenuzaron una galleta blanda para que la pudiera disfrutar y luego se acostó.
Chris agregó:
«Realmente disfruta dormir, así que ese es el mejor regalo para darle».
La reunión terminó de la mejor manera, pero cabe resaltar que Chris siempre se encarga de que todos los perros mayores que tiene a su cuidado se sientan especiales. Es por esto que el hombre celebra los eventos especiales que ocurren en su refugio y organiza fiestas para conmemorar las fechas importantes.
Chris comentó:
«Celebramos cuando los perros terminan los tratamientos de quimioterapia, los cumpleaños, las adopciones y se sabe que tienen Navidad en julio si creemos que alguien no llegará hasta Navidad».
Sin duda, gracias al trabajo de la familia Hughes, Bully tuvo un día que nunca olvidará y, seguramente, tendrá más celebraciones por disfrutar.
Si deseas ayudar a perros mayores como Bully, puedes hacer una donación a The Mr. Mo Project.
