Rebecca Lynch y su esposo disfrutaron de unas hermosas vacaciones en Savannah, Georgia, donde hicieron una parada inesperada antes de regresar a casa. La mayoría de la gente se abastecería de recuerdos, pero Rebecca decidió traer algo más significativo con ella.
Rebecca descubrió a Lizzy, una joven terrier en riesgo de eutanasia, a través de un amigo que vivía en la zona. Según Rebecca, alguien había abandonado a Lizzy embarazada en un refugio, y por supuesto, ella no iba a permitir que la adorable perrita y sus hijos tuvieran un final trágico.
Cuando Rebecca se enteró de la gran cantidad de refugios en Georgia que sacrifican perros, supo que tenía que salvar al perro más necesitado antes de regresar a casa. Ella tenía espacio en su automóvil y, por supuesto, muchas ganas de ayudar.
Perrita embarazada dio a luz en el auto después de su rescate
Lizzy, que además de estar en embarazo tenía la enfermedad del gusano del corazón, y una pata rota; no podía seguir sufriendo y Rebecca era muy consciente de eso.
La pareja hizo que el viaje de varias horas a Florida fuera cómodo para la perrita poniendo una cama y una manta en el asiento trasero. Rebecca también se sentó al lado de Lizzy, acariciándola suavemente mientras su esposo conducía, velando por su seguridad y comodidad en el largo viaje.
Pero parece que finalmente la pareja se ganó tanto la confianza de la perrita, que mientras iban a casa sucedió algo inesperado.
Rebecca le contó a The Dodo:
“Alrededor de una hora después, finalmente se relajó y frotó su cabecita contra mi mano mientras la acariciaba. Una vez que se sintió segura y cómoda, decidió que era el momento. Empezó a jadear y se puso inquieta; le dije a mi marido: ¡Creo que está de parto!”.
Sintiéndose ya a salvo en el auto de la familia, Lizzy tardó solo 20 minutos en dar a luz a su primer cachorro. Rebecca hizo de partera, ayudando a mantener la calma de la nueva mamá y asegurándose de que todos los bebés estuvieran a salvo.
Y para cuando llegaron al veterinario la familia ya se había aumentado, ¡Lizzy dio a luz no solo a un cachorro durante el viaje, sino a tres!
Por fortuna, luego de la atención veterinaria, donde dio a luz a otro cachorro, les confirmaron que todo parecía estar bien con la madre y sus bebés, así que se dirigieron a casa.
Pero la increíble aventura hacia la libertad en la que se habían embarcado hace tan solo unas horas no iba a terminar allí. Para cuando la familia logró llegar a casa, el número de perros que había tenido Lizzy se había aumentado en dos más, para un total de seis cachorros sanos y fuertes.
El viaje de la familia estuvo plagado de sorpresas, pero esto solo significó un nuevo comienzo para la perrita. Lizzy y sus seis cachorros pasarán unos días más en el veterinario antes de reunirse con Rebecca, y comenzar su periodo de acogida para encontrar hogares responsables a cada uno de ellos.
Rebecca agregó:
“Lizzy es una muñeca. Bendito sea su corazón, con todo lo que ha pasado en su corta vida, es tan cariñosa y confiada. Es un alma amable y cariñosa”.
Lastimosamente, meses después de su rescate, Lizzy tuvo que ser sometida a una cirugía para la amputación de su pierna, la cuál estaba tan dañada que no pudo ser salvada. Pero Lizzy ha demostrado su fortaleza, y sus ganas de enfrentar los obstáculos que se presentan en el camino. Ahora es feliz con Rebecca y su familia, quienes decidieron quedarse con ella y darle el hogar de sus sueños.
Gracias a esta familia, Lizzy será muy feliz, y podrá disfrutar del amor y comprensión que todo perro merece.