La llegada de un bebé a la familia puede llegar a ser una situación estresante cuando no conoces cuál será la reacción de tus animales de compañía. Jenn Erckert tuvo una niña a la cual llamó Bailey, en junio del año pasado y nunca llegó a imaginar que sus adorables conejos gigantes sentirían una conexión tan linda con la bebé.
Alfie y Amelia estuvieron junto a Bailey en su primer encuentro y sus orejas eran casi tan grandes como ella.
Jenn dijo a The Dodo:
«Alfie intentó saltar al asiento del auto, y Amelia simplemente olfateó. Sin embargo, ambos eran muy amables, así que sabía que serían los mejores amigos».
Alfie y Amelia, que viven libremente en la casa de la familia de Wisconsin, demostraron desde un inicio que cuando Bailey se encontraba en la habitación, nada era más importante.
Jenn dijo:
«Ella siempre es su centro de atención. Están a su lado cuando ella esté durmiendo. Tienden a rondar un poco, como si la vieran inmediatamente como su responsabilidad a proteger».
Bailey también ha demostrado un gran interés hacia este par de conejos enormes, ella siempre los voltea a mirar cuando entran a la habitación, le encanta alimentarlos con golosinas. Estos conejos pueden pesar mas de 20 libras, son del tamaño perfecto para ella.
Aunque suene algo difícil de creer, estos animalitos le han enseñado a Bailey mucho sobre el respeto y la bondad, y seguramente así será a medida que la niña crezca.
Jenn dijo:
«Definitivamente ellos son protectores de Bailey. Alfie golpea si Bailey está llorando. Cuando Bailey está durmiendo, las dos permanecen oliéndola para ver si está despierta».
Muchas familias pueden llegar a temer sobre la convivencia de los conejos con los niños, pero sin duda alguna, ellos se encargarán de brindarle cariño a personas de todas las edades. De igual manera, siempre es necesario que exista supervisión.
Debido al comportamiento de Alfie y Amelia. Jenn ha comenzado a entrenarlos como conejos de terapia oficial, trabajando con una organización llamada Pet Partners. Después de que reciban su certificado, ellos podrán realizar visitas a hospitales y hogares de ancianos para brindarles afecto a los pacientes.
Jenn ha realizado un seguimiento al progreso de estos conejos, por medio de una página de Facebook llamada Rabbitat For Humanity.
Jenn dijo:
«Creo que las personas tienen mucha curiosidad sobre ellos, ya que los conejos no son las primeras mascotas que las personas ponen con un bebé. Con Bailey, ahora puedo mostrarle a la gente que solo porque tengas un bebé no significa que no puedas mantener a tu conejo. Continúo promoviendo la terapia con conejos, ya que demuestra lo maravillosos que pueden ser con los niños. También me da la oportunidad de educar a la gente sobre el cuidado de los conejos, no son solo un animal que puedes poner en una jaula».
Pareja de conejos gigantes deciden estar a cargo de su hermana bebé
Los conejos suelen vivir 10 años aproximadamente, y el vínculo que nace con sus familia es bastante estrecho.
Jenn dijo:
«Son animales tan dulces por naturaleza, y pueden ser menos intimidantes para un niño porque no ladran»
Jenn se enamoró por primera vez de conejos gigantes hace unos cinco años, cuando su esposo llevó a su casa un conejo flamenco gigante hembra llamada Betsy, ellas se convirtieron en grandes amigas, y Betsy apoyó a Jenn tras sufrir la muerte de su madre.
Posteriormente, Jenn decidió adoptar a un conejo llamado Walter, y ambos fueron entrenados como conejos de terapia certificados. El espíritu de ellos ahora se encuentran vivos en los jóvenes Alfie y Amelia.
Jenn dijo:
«Los conejos siempre han sido mis bebés, por lo que ver cómo respondieron de inmediato fue increíble, y ver crecer el vínculo a medida que interactúan más es realmente un hermoso espectáculo. Con Bailey aún tan joven, los tres dependen completamente de nosotros para comer, un lugar seguro para dormir, amar, etc. Creo que, en muchos aspectos, ellos reconocen eso. Es como si tuvieran su propio lenguaje».
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