Mucho antes de que Beethoven se hiciera famoso en el cine, los perros de raza San bernardo eran populares por rescatar personas. Tradicionalmente, este tipo de perro ha cumplido la tarea salvar la vida de los humanos que se encuentran en problemas, pero esta vez la historia cambió.
Según la revista Smithsonian, los San bernardo han rescatado gente de la montaña gracias a su gran sentido de dirección y resistencia al frío, desde el siglo XVIII.
Los primeros perros de esta raza fueron criados por monjes que vivían en el paso San bernardo, una ruta peligrosa a través de los Alpes. Todo con el fin de que estos peludos gigantes los ayudaran en diferentes misiones de rescate después de fuertes tormentas de nieve.
Perro rescatado de la montaña más alta de Inglaterra

En un lapso de casi 200 años, esta increíble y heroica raza de perros, ha logrado salvar aproximadamente unas 2000 personas, desde niños hasta soldados antiguos, según la revista Smithsonian.

A pesar de toda su historia de rescates, los roles se invirtieron esta vez cuando una perrita de esta raza era el que necesitaba ser rescatada de la montaña más alta de Inglaterra. La perrita de 121 libras, llamada Daisy, necesitaba ayuda desde el Scafell Pike.

Estaba caminando con su familia, y luego de varias horas de travesía, empezó a mostrar signos de dolor y se negó a moverse. Luego de ver está difícil situación, la familia decidió pedir ayuda al centro de rescate más cercano que tenían a su alcance.

Entonces, se inició una operación de rescate a cargo de 16 miembros de Wasdale Mountain Rescue Team, y se llevó a cabo en un lapso de cinco horas. Pese a que las condiciones fueron muy difíciles, el equipo logró su objetivo.

El equipo de rescate dijo en un comunicado:
«Los dueños de Daisy, pudieron mantenerla bien hidratada y alimentada hasta que los miembros del equipo pudieron entrar en escena con una camilla para ayudarlos a moverse nuevamente, ya que el clima se deterioraría más tarde».
El plan inicial del equipo fue ese; llevar a la canina gigante en una camilla, hasta llegar a un lugar seguro para todos.

Los rescatistas enfrentaron muchos obstáculos durante su caminata, pasaron por colinas empinadas, caminos rocosos y hasta en medio de una cascada, pero nada los detendría. Gracias a su buen entrenamiento y a una serie de tácticas de supervivencia, los rescatistas pudieron llevar a Daisy cuesta abajo en la camilla.

Mientras caminaban, los padres adoptivos Daisy, dijeron que la perrita había tenido un difícil comienzo de vida, hasta que ellos la adoptaron, unos meses atrás. No tenían muy claro el porqué de su reacción a la caminata, pero era casi evidente que tiene que ver con un problema de salud.

El equipo de rescate dijo:
«Aparentemente se siente un poco culpable y un poco avergonzada por decepcionar la imagen de sus primos rebotando en las nieves alpinas con barriles de brandy alrededor del cuello».

Después del incidente, se pudo conocer que Daisy se encuentra bien en su hogar, y volvió a su buen humor habitual, dando alegría a sus seres queridos.