A los gatos les gusta mucho sentarse en el regazo de sus dueños, pero hay una gata en particular que llevó este gusto al extremo. Ziggy, la gata de 10 años, que no tiene respeto por el espacio personal, fue adoptada de un refugio en Londres, por Rebecca May y su esposo, Alex.
Al principio Ziggy era muy tímida, pero cuando se sintió cómoda, no dejaba de posarse en el regazo de sus dueños con mucha frecuencia. Pero las adorables exigencias de Ziggy se fueron convirtiendo en un problema cuando sus padres comenzaron a trabajar desde casa.
Rebecca dijo a The Dodo:
«Cuando se une con alguien es realmente intenso. Ella tiene que estar sentada contigo».
Gata pegajosa feliz con su regazo falso

Ziggy siempre está buscando un regazo disponible, incluso antes de que sus padres se sienten ella ya está planeando su ataque de caricias.
Rebecca dijo:
«Sus orejas se aplastan y sus ojos se ponen negros cuando piensa que estás a punto de sentarte. Es casi como si tu regazo fuera un objetivo y ella está allí, así estés listo o no».

Si no encuentra un regazo disponible, Ziggy siempre busca la manera de acercarse a sus padres, ella se sienta en la espalda o se balancea sobre sus brazos. Para Ziggy no hay nada más importante que pasar el rato con la atención y compañía de sus personas favoritas.

Para llamar la atención de Rebecca, Ziggy se sube a su escritorio y se acuesta en el teclado de la computadora, dificultando las tareas de ella. Para tratar de resolver el problema, la pareja compró una cama para gatos, la puso al lado del computador para que Ziggy pudiera permanecer cerca.
Rebecca dijo:
«Creemos que necesita calor y sentirse protegida».
La pareja intentó diferentes maneras para calmar a su gata, pero nada parecía ser suficiente para que estuviera contenta.

Fue entonces cuando a Alex se le ocurrió la idea de crear un regazo falso para que Ziggy se acomodara cuando no pudieran estar con ella. Él pensó que si ella es feliz y calmada cuando está sentada en el regazo, entonces por qué no crear uno falso para ella.
Alex tomó un par de pantalones y los rellenó para que parecieran piernas humanas, agregó zapatos y una almohada que servía como estómago. Pero, el verdadero toque de ingenio y magia era la almohadilla térmica que puso entre el regazo de los pantalones, para brindar calor.

Rebecca dijo:
«Pensó que crear un señuelo sería divertido, pero no creo que esperara que realmente funcionara. Harley (hermana de Ziggy) estaba totalmente desinteresada, pero a Ziggy le encantó».
La gata rápidamente encontró el camino hacia el señuelo, y permaneció en el regazo falso por más de 4 horas; la idea había funcionado.

Rebecca quedó contenta y decidió publicar la historia en Reddit, acompañado de la siguiente leyenda:
«Nuestro gato se ha vuelto super pegajoso ahora que ambos trabajamos desde casa. Tuvimos que improvisar».
Las reacciones por parte de usuarios y propietarios de gatos no tardaron en llegar, felicitaban su solución creativa a los problemas y querían probar la idea.

Si bien, el regazo falso ha funcionado perfectamente, los padres de Ziggy saben que no es un reemplazo para el verdadero.
Rebecca dijo:
«Creo que los pantalones son un poco aterradores para mantenerse todo el tiempo, pero definitivamente lo sacaremos cuando tengamos un día ocupado de llamadas».