En vísperas del Diwali (festival indio que dura cinco días), cuando el cielo se llenó de fuegos artificiales y ecos de fuertes aplausos y golpes, una asustada cachorra llamada Pip buscó refugio en una alcantarilla abierta. Al día siguiente, la SPCA de Kloof y Highway recibió noticias de esta criatura atrapada al borde del peligro.
Cuando la familia de la cachorrita oyó sus débiles gritos resonando dentro de la tubería, supo que algo iba mal. A pesar de sus esfuerzos por sacarla, Pip permaneció inmóvil en el interior.
Ndonie Shezi, uno de los dueños de Pip, le dijo a The Dodo:
“Probamos hasta las 9 pm más o menos. Apenas dormimos, y a las 5 a.m. estábamos levantados nuevamente tratando de rescatarla”.
Escuchan llantos provenientes del desagüe y encuentran una diminuta cachorra

A pesar de sus infructuosos intentos, Petros Simamane, inspector de la SPCA de Kloof y Highway, se ofreció a ayudar. Aunque era una tarea desgastante para él, tanto física como emocionalmente, era consciente de que era esencial sacar a la cachorrita sana y salva. Se dirigió en busca de herramientas como picos y palas; sin embargo, cuando volvió al sistema de tuberías del metro, se dio cuenta de que había llegado mucho más lejos de lo previsto.

Petros dijo:
“Iba en reversa, retrocediendo. En la tubería, también había una caída, así que creo que ella cayó allí, donde no podía subir”.
Petros reconoció la necesidad de una cámara de desagüe adecuada, pero para conseguir las herramientas apropiadas tuvo que contratar a un fontanero. Se puso en contacto con Ganga Plumbers, una empresa cercana y preguntó si alguien podía ofrecerle su ayuda.

Cuando Simamane llamó a Ganga Plumbers, Rishi Haripersad ya estaba en otro trabajo. Pero cuando se enteró de que una perrita había quedado atrapada en el desagüe, el director de la empresa le ordenó que dejara lo que estaba haciendo y ayudara inmediatamente.
Rishi cuenta:
“El propio director dijo: ’Hagamos una pausa en todo el trabajo. Vamos a ayudar a rescatar a este cachorro’”.

Rishi maniobró con cuidado la cámara por el desagüe y, tras recorrer unos sesenta pies, la cara de asombro de Pip se iluminó en la pantalla. Para su sorpresa, había otra abertura en un lado distinto de la valla, lo que indicaba que podían empezar a excavar inmediatamente.

Tras un esfuerzo agotador, Simamane salvó milagrosamente a Pip del desagüe. La cachorrita estaba completamente cubierta de barro y tenía poca energía. Afortunadamente, después de que le dieran un poco de cariño, incluido un baño, la hora de comer y una cita con el veterinario, ¡se sintió mucho mejor! Lo que realmente la hizo sentirse contenta fueron todos esos cálidos mimos.

Tras un periodo de recuperación en el refugio, Pip ha vuelto al cariñoso abrazo de su familia. Rishi expresó su alegría por poder ayudar en esta misión de rescate.
El hombre dijo:
“Es bastante satisfactorio saber que hemos ayudado a una cachorra indefensa”.