Jamaica es una encantadora pitbull rescatada por su familia desde que era solo una cachorra que tiene una enorme debilidad por los objetos suaves y esponjosos. Por supuesto, existe un juguete con estas características en particular que gobierna por completo el corazón de esta dulce perrita, y se trata de su pulpo masticable de color rosa brillante.
Lamentablemente, las largas jornadas de juego y la atención que Jamaica le da a su amado juguete, finalmente ha dejado algunas consecuencias. No pasó mucho tiempo para que el pulpo rosa comenzara a mostrar algunos signos de desgaste, hasta que un día el juguete con tentáculos se rompió.
Ana María Peñas del Águila, la madre de Jamaica le dijo a The Dodo:
“Le encanta todo lo que es suave y blandito. ¡Hace unos meses, mi madre le dio el pulpo y le encantó!”.
Perrita no se separa de su juguete mientras le realizan una ‘cirugía’
Jamaica estaba realmente triste, pero por suerte no fue por mucho tiempo. La madre de Ana trató de ayudar a su adorable perrita e intervino para realizar una arriesgada cirugía de emergencia en el «juguete herido». Y por supuesto que la perrita estaba bastante preocupada, y nunca se apartó de su lado un solo instante.
Mi perra ha roto su juguete favorito actual (un pulpo ????) y se lo ha llevado a mi madre para que se lo cosa ???? pic.twitter.com/4AQu5Bf95P
— Chio ???? (@DemonChocolate) June 30, 2021
Pero desde entonces, la atención que Jamaica le da a su amado juguete le ha seguido pasando factura y ha pasado por el «quirófano» unas cuantas veces más.
— Chio ???? (@DemonChocolate) June 30, 2021
Ana cuenta:
«¡Su pulpo ha necesitado cirugía, como tres o cuatro veces! Cada vez, Jamaica espera pacientemente hasta que esté cosida. Cuando recupera el juguete, se pone muy feliz».
Ana sabe que llegará el momento en que el pulpo de Jamaica sufra debido al paso del tiempo; sus daños sean irreparables, la «cirugía de emergencia» no funcione y deba ser reemplazado por otro juguete, pero hasta que llegue ese momento y gracias a esas cirugías, su perrita seguirá disfrutado de grandes aventuras junto a su juguete favorito.
Ana finalmente dijo:
«La amo. Es una perra muy, muy buena».